jueves, 12 de noviembre de 2015

LA BIBLIOTECA DE PIPPI 46

Seguramente no lo recordareis, porque han pasado muchos años, pero la biblioteca de Pippi en Kunterbunt (“Villa Colorines”) era una de las habitaciones que daba al porche donde solía estar refugiado Pequeño Tío. En casa de Pippi no había libros, solo “píldoras”, porque nuestra pequeña y vieja amiga no tenía tiempo para leer más que unas pocas líneas seguidas entre sus múltiples actividades legales e ilegales.

Así pues, su biblioteca estaba compuesta de multitud de hojas sueltas que se amontonaban en confusas pilas sobre las estanterías vacías y la gran mesa camilla bajo la que encendía el brasero de picón.

Hoy Pippilotta Viktualia Rogaldina Shokominza Langstrumpf ha entrado a la biblioteca en uno de los esporádicos momentos en los que se atenuaba su frenética actividad. Ha tomado una de las hojas que esperan polvorientas sobre la mesa y se ha hundido en el sillón que hay bajo el ventanal. Al otro lado Pequeño Tío la observa entre orgulloso y divertido.

-¿Tu de que te ríes? -le pregunta Pippi a través del cristal polvoriento.

Esto es lo que después ha leído.

Cuando Tom y yo volvimos a vernos al día siguiente a la hora de comer, ambos comprendimos que estábamos estableciendo un pequeño ritual. No lo decíamos explícitamente, pero salvo las veces en las que surgían otros planes o compromisos, siempre procurábamos vernos a mediodía para almorzar juntos. No importaba el hecho de que yo tuviera el doble de años que él y que en otro tiempo fuese el tío Nat. Como Oscar Wilde dijo en cierta ocasión, después de los veinticinco todo el mundo tiene la misma edad, y a decir verdad nuestras circunstancias actuales eran casi idénticas. Los dos vivíamos solos, ni él ni yo salíamos con nadie, y no teníamos muchos amigos (en mi caso, ninguno en absoluto). ¿Qué mejor manera de romper la monotonía de la soledad que manducar con tu compadre, tu semblable, tu Tomassino, tanto tiempo perdido de vista, y darle un poco a la sin hueso mientras llenas el buche? 

ENLAZA AQUÍ CON EL LIBRO 

martes, 10 de noviembre de 2015

MITOS DE LA CREACIÓN POR LOS INDIOS DE NORTEAMÉRICA Curtin, Jeremiah

Entre los iroqueses hay una información detallada de la forma en que los mitos fueron narrados en un espacio circular abierto de un bosque profundo... Desde debajo de esta piedra salió una voz que contó la historia del mundo anterior, contó cómo los primeros pueblos se habían convertido en lo que son en la actualidad.
Los mitos de la creación de los americanos nativos forman un sistema completo, porque dan una información detallada del origen del mundo y de todas las criaturas que existen en él. Los ancianos de las tribus han pasado estos mitos de generación en generación, fortaleciendo así un lugar particular en el mundo y estableciendo un sentido absoluto de relación entre las tribus, la tierra y los animales.
En 1898, después de años de búsqueda esmerada y meticulosa a través del continente de América del Norte, Jeremiah Curtin anotó los extraordinarios cuentos que le habían contado los ancianos de las tribus.

Ref. 9005
Autor: Curtin, Jeremiah
Idioma: Español
Editorial: M.E. (Madrid)
1997
13,50x21 cm.
395  páginas. Cubiertas en rústica. Muy buen estado.

miércoles, 4 de noviembre de 2015

LOS SUBTERRÁNEOS Kerouac, Jack

La novela transcurre en San Francisco, ciudad a la que Kerouac llegó en 1953, antes de alcanzar la fama, y es un fresco de días y de noches habitadas por el jazz, el alcohol y las drogas, cabalgando entre la desesperación absoluta y las ilusiones más descabelladas, al hilo de una estremecedora historia de amor.

Ref. 8794
Autor: Kerouac, Jack
Idioma: Español
Editorial: Anagrama (Barcelona)
1998
12x18,50 cm.
159 páginas. Cubiertas en rústica. Muy buen estado.